Los materiales
son imprescindibles para lograr todo lo que deseamos de nuestra escalera, por
lo que es importante su buena elección.
La piedra
natural es un básico, como estructura la hace pesada pero a la vez muy
duradera. Al usarla en revestimiento tiene un sinfín de formas, va a depender
del corte de la piedra. Es resistente al uso y su desgaste es mínimo.
La madera es
muy utilizada tanto en su fabricación como en revestimiento, ya que se
aprovecha sus vetas naturales, que le dan un toque de estilo muy particular.
Sus diferentes tonos le pueden proporcionar desde elegancia y sobriedad hasta
un estilo fresco y casual.
Los cerámicos
son el acabado más utilizado para recubrimiento. Hay infinidad de estilos y
colores en el mercado pero es importante que el que escojamos sea
antiderrapante para evitar algún accidente.
Las juntas deben tener una buena terminación para que luzca.
El metal es
imprescindible para estructurar la escalera, tanto en su armazón como en los
peldaños. Sin ningún recubrimiento da un toque industrial en nuestra casa, por
lo que es importante el acabado del metal.
Las escaleras
hechas de vidrio proporcionan una sensación de pisar el vacio. Son seguras
siempre y cuando el grosor del vidrio sea el adecuado. Los acabados y tonos del
vidrio le pueden proporcionar protagonismo.
